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La psicoterapia breve es un tipo de terapia que se utiliza para tratar conflictos de la salud mental. Es breve porque suele durar entre 8 y 12 sesiones, que suelen ser de 50 minutos. El objetivo principal de la psicoterapia breve es ayudar al paciente a identificar y resolver las dificultades que puedan estar causándole angustia o deterioro en su vida. Puede utilizarse como tratamiento alternativo para las personas que no desean una terapia de conversación tradicional, pero que quieren ayuda profesional para los problemas de salud mental con los que están luchando.
La psicoterapia breve es un modelo de tratamiento de corta duración (normalmente entre ocho y doce sesiones) pero intensa, orientada a objetivos psicodinámicos o cognitivo-conductuales.
La razón de que las sesiones sean cortas es porque se centra en ayudar al paciente a identificar actitudes, comportamientos, problemáticas y dificultades emocionales específicas.
¿Cuáles son las características principales de la psicoterapia breve?
Las sesiones son de tiempo limitado y de corta duración: de 45 a 60 minutos aproximadamente.
Las terapias breves tienden a no utilizar procedimientos de evaluación exhaustivos, y tampoco implican un seguimiento a largo plazo una vez finalizado el tratamiento.
El terapeuta breve puede utilizar criterios de diagnóstico, pero tiende a preferir un enfoque abierto que le permita ejercer la flexibilidad en lugar de limitar su intervención con protocolos predeterminados basados únicamente en diagnósticos.
Esta terapia se centra principalmente en el presente de la persona, más específicamente en la problemática actual y en cómo es que está afectando a la persona en el aquí y el ahora.
Su objetivo es incrementar la motivación y disponibilidad para realizar un cambio y lograr la comprensión del problema a través de la autoeficacia e independencia. Esto se logra trabajando con los pensamientos y las emociones para poder realizar el cambio deseado.
De tal manera que la persona podrá tomar sus propias decisiones para darle pie al inicio del cambio de su comportamiento y, por lo tanto, de la problemática.
Las terapias breves han sido eficaces para tratar problemas de adicciones, ansiedad, depresión, fobias y trastornos relacionados con el estrés, así como para personas con déficits en solución de problemas y para conflictos maritales.
También se ha utilizado para el tratamiento breve de enfermedades crónicas como la esquizofrenia. Y ha sido útil para resolver problemas interpersonales dentro del núcleo familiar.
Las terapias breves pueden ayudar a gestionar estados agudos como las crisis provocadas por el maltrato o el duelo. Y de igual manera funcionan para mantener la estabilidad cuando el paciente lo requiere según su estado actual, por ejemplo, durante los cuidados postoperatorios tras procedimientos médicos.
El terapeuta breve trabaja con los pacientes para ayudarles a comprender sus problemas, reconocer los comportamientos que perpetúan sus dificultades y adquirir nuevas habilidades para mejorar la regulación emocional y las estrategias de afrontamiento, de modo que puedan manejar mejor las situaciones difíciles en el futuro.
La psicoterapia breve nos permite también aumentar el autoconocimiento explorando nuestros pensamientos, emociones y patrones de acción y comportamiento. De esta manera, es posible identificar aquellas conductas y pensamientos menos sanos que, a la larga, si no son modificados, podrían llevarnos a episodios de depresión o ansiedad.
Las terapias breves pueden utilizarse en entornos individuales, familiares o de grupo, así como en contextos diferentes, por ejemplo en los entornos clínicos de atención primaria, los centros de salud mental de la comunidad, los centros de asesoramiento de las universidades, los programas de asistencia a los empleados y la práctica privada.
En general, estas terapias están enfocadas hacia personas que buscan un cambio en alguna problemática específica y actual de su vida, pues la psicoterapia breve es más eficaz cuando existe una clara comprensión del problema del paciente y una fuerte motivación para llevar a cabo el cambio necesario.
La psicoterapia breve puede ser una herramienta poderosa si buscas aprender más sobre ti mismo y sobre el funcionamiento de tu mente, pensamientos y conductas en el aquí y el ahora, por lo que es muy recomendable para el tratamiento de la ansiedad.
Una de las ventajas más importantes es que está pensada para personas que no buscan un proceso terapéutico largo, sino que necesitan una intervención que refleje resultados a corto o mediano plazo, siempre y cuando exista motivación y compromiso con el cambio.
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Antes de despedirnos, queremos recordarte que toda la información que aquí te compartimos, así como las recomendaciones que hacemos, no sustituyen lo que es una terapia psicológica o un diagnóstico. Por lo que te invitamos a buscar ayuda profesional para encontrar la guía adecuada.
Fuente: -
Colaboradores: Pau Gámez y Pablo Aparicio.
Complementado con Jasper.
