Cuando aprendes a identificar tus señales de libertad se activa una nueva actitud ante el proceso de ansiedad que inevitablemente lleva a la transformación.
Puede que la misma confusión que genera la ansiedad te haya llevado a concluir que no tienes elección y que este proceso por el que estás pasando, tiene que estar lleno de sufrimiento. Este tipo de conclusiones son típicas “trampas” de la ansiedad que al quererte proteger, de peligros distorsionados, te nubla la percepción sobre la realidad y pone su foco ampliado en los posibles riesgos.
La buena noticia es que probablemente hayas vivido momentos de libertad, incluso sintiendo ansiedad. Por lo que puedes empezar a abrirte a la idea de que SI eres capaz de generar y ampliar tu libertad, porque es algo innato en ti.
La libertad es tu naturaleza.
El primer paso, muy importante es tomar consciencia de esos momentos de libertad, que aunque sean breves, existen. Cuanto más practiques dirigirte hacia la libertad más podrás expandir ese centro único, inquebrantable y estable que no depende de ninguna situación externa. De esta forma inevitablemente se genera un cambio de actitud en el que agradeces todo este proceso, ya que te ha permitido conectar con tus fortalezas y capacidades. Las haces visibles y reconoces que SI es posible vivir en libertad.
Te voy a dar algunos ejemplos que me han sido de apoyo para que puedas reconocerlos y seguir tu camino.
Y tú… ¿qué señales de libertad encuentras en tu proceso?
Haz la prueba. Encuentra y anota tus propias señales de libertad. Durante el día activa una actitud de curiosidad y sorpréndete descubriendo las veces en las que actúas desde tu centro. Reconoce que sí tienes elección y elige vivir desde la libertad.
Te dejo un video del Dr. Viktor Frankl, que me gusta mucho. También puedes continuar leyendo este post donde te comparto mi experiencia para sentirme libre.