Alfred fue un concursante de Operación Triunfo de España y tuvo que abandonar el escenario un par de veces porque se sentía mal, con una crisis de ansiedad, pero al hacerlo y después salir a platicar lo que le pasó, nos dio un gran mensaje a todos, y es que no has de avergonzarte por lo que sientes, ni dejar de hacer lo que te gusta por la ansiedad.
Conozco muchas personas que inclusive no comparten que tienen ansiedad con sus parejas, con sus padres y con sus seres queridos, ya que quizás, tienen miedo a ser juzgados, no ser apoyados. Y es normal, pues a veces, si tienes ansiedad, es porque vienes de una familia o sector social que te presiona mucho, que exige de tu perfeccionismo.
Y ahora imagínate, estar frente a la cámara, frente a miles de personas, con una exigencia real a llevar a cabo un desempeño único.
Así le pasó a Alfred García de Operación Triunfo 2017, quien durante una presentación tuvo que abandonar el plató porque empezó a marearse y a presentar una crisis de ansiedad.
Me imagino, que seguramente lo que le pasó es que empezó a acumular la tensión de las semanas pasadas, junto con la presión de irse acercando a la final, a la mejor empezó a sentir sensaciones extrañas antes de la presentación, a marearse y quizás, y quizás, quizás, empezó a tratar de controlarlas para poder salir al escenario sintiéndose bien, aplicando todo lo que ya sabemos de tratar de respirar y enfocarse en la tarea.
Y probablemente, no le funcionó, y entonces la mente (a la mejor) empezó con pensamientos como que no podía echarse para atrás, que qué tal que hacía el ridículo o le fallaba a sus seguidores, a la mejor su mente lo presionó a que tuviera un buen desempeño, hasta que todo esto fue en escala y realmente se vio incapaz de salir.
Y es que así funciona la ansiedad; mientras más tratas de controlarla para poder hacer lo que quieres, más aumenta.
Ya nos platicará Alfred si así fue lo que le pasó, y si sí, déjame te platico que así le pasa al 80% de las personas que llegan a un ataque de pánico, estén en la circunstancia que estén.
A todo el mundo que tenga ansiedad quiero decirles lo que mi médico me dice a mí: "Aunque os cueste la puta vida vas y lo haces”.
Lo cual es parecido a la frase de "hazlo con todo y miedo", y está bien, hay que hacer lo que nos gusta a pesar del miedo, aunque no le tenemos que sufrir tanto si hacemos el proceso de hacer las paces con la ansiedad.
De momento, podemos aprender sobre los hechos, lo que vimos que fue lo que realmente pasó, y esto es:
Podemos aprender que no es fácil atravesar por la ansiedad y los ataques de pánico, y que no importa quién seas o dónde estés, cuando te agarra o te pilla el ataque y te sumerge en toda su dinámica, realmente te imposibilita para hacer lo que tienes que hacer
Y hay que tener mucha comprensión para nosotros, y para quienes lo atraviesan, pues no es nada más algo inventado por nuestra mente, es realmente una activación de un peligro interior, y que sí, hay muchas cosas que podemos hacer para que no escale y podamos hacer lo que queremos, pero no es a través del camino del control y la exigencia.
Canta, porque amas cantar, canta para ti, canta porque te apasiona. Recuerda el propósito y sentido que tiene para ti, y hazlo por ti, para ti, para ese propósito aunque sea para alguien más, pero que sea tu propósito.
De lo demás, hazlo a un lado. Habrán personas a las que les gustará tu voz, otras a las que les harás llorar... conectarás con las personas indicadas, siempre y cuando seas congruente con tu propósito y con tu esencia.
Usa todos los nervios previos de salir al escenario, como fuerza y potencia hacia tu voz, no se trata de querer eliminar las sensaciones, no se trata de estar perfecto antes de salir, se trata de salir usando todas esas sensaciones como potencia.
Ya que quizás te has dado cuenta, que mientras más quieres ocultar lo que sientes, menos poder tienes sobre de ello.
Es mejor, olvidarte de querer ocultar o de querer ser perfecto, y asumir esas sensaciones previas y usarlas, es como si las dejaras subir como agua que fluye hacia tu garganta y tu rostro, hacia tus brazos y tus piernas, dándote estabilidad.
Y sí, sal al escenario con todo y miedo como te dijo tu psicólogo, pero sobre todo, usándolo, aceptándolo y convirtiéndolo en poder para mostrarte.
Estoy segura que en medio de los nervios o la ansiedad, estás tú, con una alta sensibilidad y talento, y no se trata de hacer a un lado quién eres, sino precisamente de mostrarte, dejarte ser visto, ya que eso será precisamente lo que te posicionará y conectará con los demás de una forma genuina y humana.
Si te sientes en una situación parecida a la de Alfred, en la que tienes que presentarte ante otras personas, tener un buen desempeño o algo por el estilo, recuerda para qué quieres hacer lo que vas a hacer, no luches contra lo que sientes y úsalo, aprovéchalo para mostrarte tal y como eres, pase lo que pase, si obtienes lo que obtengas a través de ser tú mismo y no luchar contigo, obtendrás lo mejor para ti en este momento de tu vida.